LA LLUVIA QUE NO CESA

Pero el proceso de Ramón Martínez es más singular: él parte en este libro en general de la influencia de la canción en su libro de poemas de amor, una suerte también de raíz de El libro del buen amor, del Arcipreste de Hita, en la proyección de su experiencia amatoria, erótica y existencial.
EL SUEÑO DE TAMAR

El Libro de los papeles perdidos de Tamar de Córdoba es un poemario esencialmente bello, recamado de versos tan nobles y radiantes como estos: “Inventa de verdad un beso …/… sin vencedores ni vencidos”, “Ahora soy la única dueña de las dunas. Ahora no se me resiste un espejismo” o “Puedo leer la voz del agua.